Es autor de la obra «Aporte para la Historia del Madre de Dios», editado en 1928.
Consideramos que es la mayor y mejor contribución de este religioso, que paralelamente a su labor misionera, recopiló los datos geo - históricos del departamento.
Es una obra, que debe ser fuente de lectura y aprendizaje obligatorio para los estudiantes, por el copioso contenido de su memoria que recopila los acontecimientos pasados y actuales de la época que le tocó vivir. Las Investigaciones del P. Pio Aza, se remota a la época del Incaico, sigue con la conquista y continua con las expediciones de Faustino Maldonado, Carlos F. Fitzcarrald, y de otros, la llegada de los primeros caucheros traídos por don Ernesto L. Rivero y la lucha incesante contra el sistema de explotación llamado «Correrías».
El P. Fray J. Pio Aza, hace una descripción exacta y pormenorizada de los ríos, respecto a sus orígenes y afluentes, refutando con argumentos valederos, a muchos que habían escrito sobre ellos de manera antojadiza. Realizó una enorme contribución al establecer las distancias de las diversas localidades tanto a nivel fluvial como terrestre.
Definió las ubicaciones geográficas mediante las coordenadas e igualmente de los hitos de la frontera Peruana – Boliviana.
Quizá el mérito de mayor resonancia del P. Pio Aza, es su lucha contra las «Correrías» del brutal sistema que convertía a los nativos en esclavos y que los sometían muchas veces a castigos hasta causarles la muerte. Se daba el caso de que separaban a los padres de los hijos, y las esposas vendidas a otro patrón.
Queda el infausto y doloroso recuerdo de las «Correrías», contra aquel sistema que luchó y denunció en diversas oportunidades ante la Autoridad y que “vendían” a los nativos a caucheros de Bolivia y Brasil y que abandonados a su suerte, muchos no pudieron regresar al lado de los suyos.